Denominamos Arte Sacro a todas las obras artísticas que tienen como finalidad servir de culto a lo divino y que por medio de pinturas, esculturas o mosaicos pretenden desentrañar cada pasaje y aspecto divino. En el cristianismo las representaciones más habituales muestran el bautismo, la crucifixión, la muerte y resurrección de Jesucristo, el juicio final, pasajes de la Biblia y a la Virgen María. Hay un ligero matiz que diferencia lo que entendemos por Arte Sacro y el Arte Religioso, ya que el arte religioso no tiene por qué servir de culto a lo divino, aunque la temática sea común: todo Arte Sacro es Arte Religioso, pero no todo Arte Religioso se puede considerar como Arte Sacro.
Todo esto encontraremos en los próximos textos que dedique sobre el Arte Sacro y para los que espero vuestra colaboración, tanto mediante comentarios como para la elección de obras artísticas.